El Sistema sueco de retorno (SRS) es un sistema compartido de cajas y palés reutilizables que utiliza la industria de alimentos y bebidas del país. El sistema B2B se puso en marcha en 1997 y ahora cuenta con más de 1500 empresas participantes. El resultado es que más del 50 % de todos los productos frescos en Suecia se entregan en envases reutilizables.
Las empresas pagan una tarifa de usuario o un alquiler diario para formar parte del sistema, que es propiedad conjunta de la Asociación comercial de comestibles de Suecia y la Asociación sueca de minoristas de alimentos y bebidas.
Por qué es un ejemplo de economía circular
El Sistema sueco de retorno reemplaza un modelo fragmentado de cartón de un solo uso o cajas de madera, con un sistema de embalaje reutilizable, donde las tarimas y las cajas se pueden usar una y otra vez.
Los palés y cajas:
son robustos y ligeros;
protegen los productos del daño;
tienen menores costos de transporte;
aumentan la facilidad de manejo.
En 2019, se reciclaron 150 millones de cajas y 8 millones de palés a través de SRS, lo que redujo significativamente los residuos de embalaje generados por la industria de comestibles.
Las cajas son muy duraderas: en promedio, duran 15 años. Cuando ya no se pueden usar, se pueden reciclar y convertir en cajas nuevas.
El éxito del sistema se debe a la amplia colaboración de la industria y al diseño estandarizado de alta calidad, que brinda muchos beneficios comerciales a los productores y minoristas.
Beneficios
Las operaciones comerciales se optimizan, ya que pueden calibrar los sistemas de envase con precisión con las dimensiones precisas de las cajas.
Los costos de transporte se reducen, puesto que las cajas son más livianas que las cajas tradicionales y hay menos daños en los alimentos. Por ejemplo, las roturas de huevos se reducen en un 75 % cuando se utilizan cajas reutilizables SRS.
Como las cajas se pueden colocar directamente en los estantes, se elimina la necesidad de desempacar, lo que reduce la mano de obra en una tienda típica en 160 horas al año.
Cada año, en comparación con los envases de cartón, el SRS elimina 50 000 toneladas de residuos materiales y reduce las emisiones de gases de efecto invernadero en un 78 %. Eso es un total de 32 000 toneladas menos de emisiones generadas por la industria alimentaria de Suecia en 2019.