La transición a la energía renovable es fundamental para reducir nuestras emisiones de gases de efecto invernadero, pero es solo la mitad de la historia. Para completar la imagen, necesitamos rediseñar la forma en que hacemos y producimos las cosas, incluida nuestra comida. Desde la agrosilvicultura regenerativa hasta la diversificación de la producción de cultivos, las empresas alimentarias y los agricultores han comenzado, pero queda mucho más por hacer. Esta es una economía circular para los alimentos: en lugar de manipular la naturaleza para producir alimentos, los alimentos pueden rediseñarse para que la naturaleza prospere.
La economía circular: eliminar los residuos y la contaminación, hacer circular productos y materiales, regenerar la naturaleza.